martes, 7 de julio de 2009

Reportajes

Laberinto de las Ciencias y las Artes de San Luis Potosí

Conocimiento creativo

Es un espacio donde coexisten la sensibilidad, el conocimiento y la capacidad de creación, pues el arte y la ciencia forman el vínculo que permite conectarnos y relacionarnos con el universo. El Laberinto de las Ciencias y las Artes fue diseñado para vivir experiencias únicas que nos invitan a interactuar de manera divertida con las expresiones artísticas y científicas. 

El Laberinto es unos de los recientes atractivos turísticos más destacados  en nuestro estado. El conjunto además de ser bioclimático y autosostenible, toma como elemento principal flora endémica de San Luis Potosí. En el patio central se distribuyen los diferentes pabellones, que al igual que en un laberinto nos sugieren recorrerlo para descubrir un universo diferente en cada una de sus salas. Las cinco salas temáticas se visitan libremente; ya que se pueden recorren sin tener continuidad, entrando y saliendo a cualquier hora.

Además, cuenta con un observatorio, una sección con animales de granja, un foro al aire libre, una sala de exposiciones temporales; y, en los pasillos, se exhiben instalaciones artísticas y esculturas de gran formato hechas con elementos naturales.

La gama de sonidos, texturas, imágenes, colores y formas sugieren al visitante despertar su imaginación. Asimismo, nos permite conocer por medio de sensaciones y, de manera muy cercana, las diversas representaciones de cómo el hombre percibe el universo, y se comunica a través de redes sociales, naturales y tecnológicas, que convergen en un todo conexo. 

 

martes, 23 de junio de 2009

Guía Huésped sale de la ciudad








Aunque había una idea generalizada sobre la finalidad del anunciado Taller de Creatividad, persistía entre los convocados cierta expectación sobre cómo se desarrollaría o qué íbamos a hacer ese día. “¿Nos van a poner a bailar? ¿Vamos a cantar delante de todos?", se preguntaban algunos. Y el asunto no era para menos si consideramos que este tipo de talleres no eran una práctica recurrente, que la ejecutiva sala de juntas serían ahora los charalebirrianevadotoluqueños aires chapálicos de Jocotepec, y, sobre todo, que rondaba la sombra amenazante de un personaje que muchas veces olvidamos invitar (aunque todos creamos que siempre nos acompaña): la creatividad.

Con una coordinación al más puro estilo uruguayo, el taller se desarrolló bajo tres premisas: pensar sin límites, apertura a la crítica, y reflexión profunda. Divididos en tres equipos de cinco elementos cada uno, las cuatro horas que duró la dinámica sirvieron para concluir: que las Guías Huésped son un trabajo de alta calidad, que siempre pueden mejorarse, y que hay mayores posibilidades de éxito cuando se trabaja en equipo.

Apenas concluyó la actividad, todos los que quieren y aman el fútbol nos dirigimos al engramado anexo y armamos dos ultraselecciones que eran la envidia del Real Madrid, el Barcelona y el Milán juntos. La verdad no supe cuántos quedamos (perdí la cuenta cuando íbamos 9-1 en contra), pero sin lugar a dudas, en esta disparidad mucho tuvo que ver la violentísima entrada que sufrió el Lic. y que el arbitro no sancionó con tarjeta roja (entre los espectadores corrió el rumor de que hubo una lana de por medio).

Al grito de ¡A comer, niños! (qué bueno que el llamado fue con coma), todos nos olvidamos del balón ¡de voleibol! y nos abalanzamos sobre la taquiza que Cecy nos tenía organizada (ella dice que se la pasó toda la noche preparándolos amorosamente; más vale creerle). Aclaro que en este encuentro, donde sólo hubo vencedores, se demostró que sí se puede trabajar en equipo.

Bueno, para ser el primer taller creo que nos fue muy bien. Nos vemos en el segundo.

lunes, 15 de junio de 2009

Qué bonito es Chapala












Su lago, la gente, los charales, la nieve de garrafa, sus dulces de leche, coco, nuez, tamarindo y jamaica...


Un paseo 
por la exótica Ribera de Chapala

Salimos de Guadalajara casi a la una de la tarde (debido al desayuno que terminó siendo casi almuerzo), en el camino un poco de la música de Os tribalistas, después de 45 minutos de paisaje carretero llegamos a la ribera. Nos estacionamos como a 6 cuadras de la calle principal (pues en domingo es muy difícil encontrar estacionamiento cerca al malecón). 

Comenzamos el recorrido por la calle principal, traíamos una bolsa para día de campo, que contenía lo indispensable para pasarla bien: cervezas -por aquello de las altas temperaturas que se experimentan últimamente en nuestra cuidad- (además de que se permite beber cervezas en el malecón). Llegamos al mercado municipal... cuántas cosas hay que ver ahí, no hay mucho que decir, simplemente, es la mejor escena de la riqueza de México hecha frutas y verduras. 

Continuamos con una agradable y calurosa caminata por el malecón (que por cierto está en remodelación), la parte que ya está lista es bellísima, lo han dejado muy bonito. Nos sentamos por ahí en una de las bancas que por cierto son cómodas, esto es un plus porque la mayoría de las bancas de parques y lugares públicos son muy pero muy incómodas. 

Viendo el atardecer se acercó un ángel a ofrecernos papas fritas y charales. Teníamos tantas ganas de acompañar nuestro momento con alguna golosina que fue un regalo del cielo la aparición de esa niña. Charales con chile y limón, un sabor único y obligado si visitas Chapala por primera vez (o por segunda o cuarta). Después de un rato, decidimos recorrer el tianguis para ver las artesanías; pulseritas, máscaras, títeres, ropa, sombreros, huaraches, bolsas... y muchas opciones de comida y garnachas; elotes asados, micheladas, rusas, dulces de todo tipo, papas, jicama, pepino, sandía, pan, churros, cueritos, nieve de garrafa, cocadas... ¡mmm!

Disfrutando de nuestra nieve (la mía de mamey con vainilla) buscamos una sombra y nos sentamos a ver la gente pasar, los niños jugando con burbujas, parejas reviviendo su romance, grupos de amigos riendo, señores vendiendo globos, una estatua viviente, y mucha gente observando como nosotros. 

Regresamos a Guadalajara a las 7 de la tarde, para evitar un poco el tráfico. 
Nuestro domingo fue un paseo muy mexicano, una recarga de pilas. Un domingo de placer.


Nota: Si se le antojó algo de lo que aquí acaba de ver, leer o imaginar... 
Usted tiene que visitar Chapala muy pronto. ¡La pasará muy bien!





lunes, 8 de junio de 2009

Viejos los vientos del norte… y todavía soplan.







Era la mañana del viernes 5 de junio, 6 am para ser exactos. Como cualquier día me levanté con ganas de no hacerlo, pero junto a mi cama estaba un recordatorio: mi boleto para ver a Metallica en la Ciudad de México.

















Ir a un concierto es muy emocionante, viajar para ir a un concierto lo es todavía más; la adrenalina fluye desde que haces maletas, ¿qué me llevo? es la pregunta obligada, el boleto sin duda, el del concierto y en mi caso el del autobús: el elegido fue ETN por cómodo y accesible.
Ora sí, boletos en mano, lo demás es lo de menos. Salida viernes por la noche a tiempo, llegada sábado por la mañana a tiempo; el bendito metro jugó un papel importante, si checas los mapas que existen en cada estación llegas a donde quieras desde donde estés. El hospedaje fue cortesía de el Rober un escritor amigo de un amigo (en estos casos se recurre a todo) ya en el depa, parada sanitaria, cambio de atuendo y amonos !!! desayuno, recorrido al chopo, comida y chelas, un café y al concierto.

Metallica sin duda es referencia obligada del rock y verlos en concierto era uno de los compromisos musicales que tenia en mi vida, así que no hablaré de las bandas abridoras. Siendo las 21:30 ante poco más de 75 mil almas a punto de estallar en un éxtasis de adrenalina pura y sin decir ¡agua va! las notas de creeping death retumbaron en todo el Foro Sol que respondió con la energía contenida desde hacia 10 años (su última presentación en México). Adrenalina, gritos, explosiones, llamas de 15 metros de altura y un sonido poderoso, enmarcaron la maestría musical de Metallica, James, Lars, Kirk y Robert se entregaron a su público durante poco más de 2 horas de golpe tras golpe sin parar, haciendo un derroche de energía impresionante digno de una banda de veinteañeros, Metallica después de 28 años de carrera está sin duda en el mejor momento de su historia musical. Al final de la historia se hizo JUSTICIA PARA TODOS!!! Gracias Metallica.


Aquí están 5 tips básicos para el viajero de conciertos:

1. Boletos: transportación y concierto juntos y siempre contigo. No en la maleta, no con alguien mas, no nada!!! Siempre pegados a ti...

2. Ropa: tanto para el concierto como para viaje, los pantalones cargo son lo mejor, bolsas en los costados y además todas con botones.

3. Alimentación: no experimentes con las comidas, no quieres pasar el concierto metido en el baño. Visita restaurantes de cadena y establecidos. ¡Di NO a las garnachas!

4. Einstein y Murphy: la distancia y el tiempo no se llevan!!! Nada es más importante que tu concierto, así que no te alejes mucho, no importa que un local te diga ¡¡si llegas, no está tan lejos ! Recuerda si algo puede salir mal… saldrá.

5. Y finalmente no hagas cosas estúpidas, mantente dentro de la ley (hasta de la de gravedad) y no arriesgues ni tu salud ni tu concierto.


martes, 2 de junio de 2009

Un huésped

Hay un visitante que pasa por mi oficina cada día. Veo la vida con espejos de bondad en esta pequeña criatura. Justo escribiendo de él y se apareció por mi destino.

Viene a buscar su alimento a un árbol grande lleno de mangos que da a mi ventana. Sus colores iluminan mi día, es violeta y verde con algo de azul. Tiene un pico largo y alas largas a pesar de su pequeño tamaño. Es inquieto, explorador y observador. Se parece en eso a mí.

La bella manifestación de espontaneidad que me deja su presencia, su movimiento incesante, me hacen descubrir que encontré una manera de viajar de mi escritorio a la libertad. 





Gracias colibrí.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Comenzamos


El repentino y a la vez comprometedor privilegio de abrir esta ventana al placer de compartir experiencias de viaje, me enfrentó con un dilema harto complicado: ¿qué escribir que pretenda parecer interesante o provechoso? Después de darle algunas vueltas al asunto, mi condición de tapatío recalcitrante se impuso y he decidido, a manera de bienvenida, estrenar el espacio invitándolos a que conozcan Guadalajara (me iba a referir a la ciudad como La perla de Occidente, pero son tantas ya las perlas en México —La perla del Pacífico, del Bajío, del Conchos, de Los Altos, de la Laguna…— que no es mi intención hacer un collar y que ya estuvo bueno).

A diferencia de las socorridas invitaciones que recomiendan visitar tal o cual sitio (museos, templos, etc.), esta convocatoria tiene un carácter mucho más amplio, ya que se extiende para que nos visiten en el plan que mejor les venga en gana. Aun con los problemas que encierra (tráfico, multitudes, smog…), Guadalajara es una ciudad con una enorme y muchas veces desconocida diversidad. Es tan conservadora o liberal, ordinaria o extravagante, apacible o reventada, vulgar o refinada, flemática o irreverente, y segura o riesgosa según tus pretensiones.

 

Así abrimos hostilidades.